jueves, 5 de mayo de 2011

Van Gogh

Vincent Van Gogh
Fue un pintor holandés. A los dieciséis años trabaja como empleado en la Galería de Arte Goupil de La Haya. Demuestra su afición por la pintura y la literatura.
Vive en una modesta pensión y se enamora de la hija de su patrona. Su amor no es correspondido; Vincent es rechazado por primera vez. Esto le deprime y provoca que su carácter se muestre huraño y violento, lo que condiciona su traslado a Paris.
De su estancia en esa región de Holanda datan los dibujos de mujeres recogiendo carbón. Van Gogh se dedica por entero a la pintura y a la lectura.
Orienta su interés pictórico hacia naturalezas muertas. De esta época data su amor con una prostituta embarazada, cuyo apodo era “Sien”. Será su modelo para el famoso cuadro Sorrow.
En el verano de 1883 se recrudece su enfermedad y decide separarse definitivamente de "Sien", por consejo de su hermano. Poco después se instala con su padre en una pequeña población de Neven y se interesa pictóricamente por los temas de la Naturaleza. También cultiva intensamente el retrato.
Pinta intensamente, rompiendo con convencionalismos temáticos y formales. Recibe la visita de Gauguin. Van Gogh había pintado de amarillo su estudio cuando recibió la noticia; sin embargo, tras una discusión sobre Rembrandt, Gauguin decide regresar a París a pesar de las súplicas de Vincent, que se corta una oreja y la envía a una prostituta con la que los dos amigos habían estado.
El pintor sufre alucinaciones, el diagnóstico es epilepsia y esquizofrenia sin llegar a grados extremos. Vincent convierte su habitación en estudio pictórico y trabaja infatigablemente. Su pintura es tortuosa, violenta...
Conoce la desesperación, se siente fracasado y enfermo; le abruma la tristeza y la angustia. Con la excusa de ir a cazar cuervos, consigue un revólver prestado con el que se dispara un tiro en el estómago. Después de esto regresa a su casa y, mientras fuma, espera que la muerte llegue. El 29 de julio recibe sepultura.
Vincent van Gogh, el más genial de los pintores de finales de siglo, sólo consiguió vender dos cuadros en su vida.

Karina Nava

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